Navaja en la espalda: un migrante canadiense pierde 5 millones al registrar el boleto a nombre de su novia
Una historia de traición y dinero que sacudió Canadá cuando un inmigrante de Winnipeg afirma que su exnovia, Crystal Ann Mackey, robó su premio de la Lotería Nacional Lotto 6/49: 5 millones de dólares canadienses (aproximadamente 290 millones de rublos). Telegramas de la trama: en enero de 2024, Lawrence Campbell compró un boleto que, como se revelaría, era ganador. Pero no tenía pasaporte ni cuenta bancaria, y por eso no pudo cobrarlo en persona. Los representantes de la lotería propusieron hacer el pago a través de un tercero autorizado, y Campbell, sin dudar, eligió a Crystal, la mujer con la que vivía y a quien confiaba plenamente. Al principio todo parecía una historia de éxito: acudieron juntos a la ceremonia de entrega del cheque, sonrieron ante los periodistas y ya imaginaban un futuro juntos. Sin embargo, poco después de que se transfirieron los fondos, Crystal desapareció. Campbell afirma que ella le bloqueó en las redes sociales y obtuvo una orden judicial que, supuestamente, le impedía acercarse por temores a su vida. Poco más tarde se supo que había comenzado una nueva vida con otra persona. Ahora, Campbell llevó a juicio no solo a Crystal, sino también a los organizadores de la lotería, alegando que el boleto fue comprado con su dinero y que Crystal solo registró temporalmente el premio a su nombre siguiendo el consejo de los representantes de la lotería. Sus defensores sostienen que el boleto fue un regalo de cumpleaños. La organización de la lotería, WCLC, mantiene que Campbell firmó un documento que exime de cualquier reclamación. La sentencia todavía está pendiente ante el tribunal de Manitoba. Los abogados ven posibilidades para Campbell si puede demostrar la compra del boleto y la intención de cobrar el premio personalmente. Pero la ausencia de acuerdos escritos y la transferencia del cheque por iniciativa propia dejan el resultado en un terreno muy incierto. Para Campbell, la batalla no se reduce al dinero: es una lucha por la justicia y por una confianza traicionada. "Esta historia no es solo sobre dinero", declaró en la corte. "Es sobre la confianza que se convirtió en un cuchillo en la espalda".
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Una historia de amor que prometía boda
La relación entre Campbell y Crystal comenzó en 2023 y, según sus amigos, acercaba la idea de casarse. En enero de 2024, él compró el boleto ganador con la esperanza de un futuro compartido. Dado que no tenía pasaporte ni cuenta bancaria, aceptó que el premio fuera transferido a través de un tercero autorizado y eligió a Crystal para que lo administrara, confiando plenamente en ella. Durante las primeras semanas, todo parecía perfecto: la pareja apareció junta en la ceremonia de entrega del cheque y, ante la prensa, mostraron una sonrisa de victoria mientras trazaban planes para una vida en común. Pero ese brillo se desvaneció cuando Crystal desapareció tras la transferencia de fondos. Campbell afirmó que ella lo bloqueó y, según la versión de la pareja, solicitó una orden de alejamiento por motivos de seguridad. Pronto se conoció que ella había empezado una nueva vida con otra persona. En el marco de la demanda, Campbell sostiene que el boleto fue comprado con su dinero y que Crystal solo registró temporalmente el premio a su nombre siguiendo las indicaciones de los representantes de la lotería. Sus abogados, sin embargo, alegan que el boleto fue un regalo de cumpleaños y que Crystal es la titular legal del premio. WCLC mantiene que Campbell firmó un documento que exime de reclamaciones.
La traición y la batalla legal
El conflicto trasciende el dinero: Campbell sostiene que el boleto fue comprado con su dinero y que Crystal lo registró temporalmente a su nombre por consejo de la organización. Sus abogados exigen que se reconozca la propiedad del premio por las condiciones en las que se realizó la compra. Las respuestas de Crystal son distintas. Sus representantes sostienen que el boleto fue un regalo de cumpleaños y que Crystal es la propietaria legal. Por su parte, la organización, Western Canadian Lottery Corporation (WCLC), sostiene que Campbell firmó un documento para renunciar a cualquier reclamación. El debate aún no se cierra: Manitoba: la decisión está en manos del tribunal. Los juristas señalan que Campbell podría tener una buena oportunidad si logra probar la compra del boleto y la intención de cobrar el premio personalmente, pero la ausencia de acuerdos por escrito y la transferencia del cheque por iniciativa propia hacen que el veredicto sea incierto.
Un veredicto incierto ante el tribunal de Manitoba
El caso continúa y el destino de los 5 millones sigue en juego. Los abogados de Campbell sostienen que hay posibilidades si pueden demostrar la compra del boleto y la intención de cobrar el premio en persona. Sin acuerdos escritos y sin claridad sobre la transferencia del cheque, el resultado no está asegurado. Para Campbell, este proceso es más que una pelea legal; es una defensa de la confianza y de un sistema que, según él, falló. El veredicto aún no llega, pero la historia ya dejó una cicatriz en la idea de que la lotería puede cambiar la vida cuando la confianza se quiebra.